lunes, 10 de agosto de 2009

Choose your own adventure



Podés olvidarte la cabeza pero nunca las llaves y la toalla.
Nadie te manda mensajitos frenéticos antes de tomar el avión.
Tenés un ejército de deliveries llamando a tu puerta por encargos varios.
Cuando comprás algo más que lo habitual tu almacenero no puede evitar un guiño de complicidad, gesto correspondido con ojos de vaca adormecida. ( No da para contestar, “ Si, hoy voy a revolcarme, Roberto, thank god!)
Sos un desastre para cebar mate en ronda.
Tenés una magnética paciencia que dura exactamente media hora con los hijos de tus amigos y cumplido ese plazo, tu reloj interno indica que es momento de escapar aunque estés en una carpa en el desierto.
Cuando recibís visitas de menores de edad, escondés la notebook y declarás que damn it! Un virus fulminante quemó tu pc de escritorio esa mañana.
No tenés lado favorito de la cama, aunque recordás vagamente haber preferido –y sólo en eso- la derecha.
Los gritos de tus vecinos te dan un sentimiento de alivio y conformidad con la vida.
Cuando estás en un hotel, un segundo antes de dormir extrañás a… tu perro.


Comés un postre sin muchas ganas sabiendo que mañana no estará esperándote en la heladera.
Tenés que encerrarte a fumar sentado en el bidet.
Compartís la música y el control remoto.
Das unas vueltas para llegar a tu casa justo cuando ya estén cerrados los negocios.
Tu celu a veces pierde señal inexplicablemente.
Dormís sin medias porque la cama siempre tiene calorcito.
Recibís quejas por enrollarte las sábanas.
Dejás la ropa en el cesto y te la volvés a encontrar perfumada y doblada en el placard.
A veces zafás de sacar la basura.
Llegás de noche buscando peace and love y te encontrás un grupete parlanchín instalado en el living.
La única forma de estar tranquilo en la compu es que sea domingo de mañana.

¿Vivís solo o acompañado?

Friendship


Cumpleaños. Muchos rubios canaritos dancing queen, y música conocida por Elle, en claro retro way.
En algún momento, había 4 personas en el baño. Léase, tres amigas y el marido de la que estaba vomitando, alma mater de la fiesta que horas antes había asegurado:
” Yo ya no me emborracho más, hace años…” ante la azorada mirada de Elle que cerca de navidad juntó muchas - muchas means más de 20-, botellas cuyo etiquetado contenido alcohólico había contribuído a vaciar entre otros la ahora abstemia rubia de años.

Las dos amigas mantenían cara de estar mirando alguna obra minimalista, manos en la espalda de quien hablaba con el blanco dios de porcelana, dándole alentadoras palmaditas, mientras el marido se tomaba la cabeza e intentaba obtener respuestas que nunca llegarían:

“-¿Estás bien?”

No. No estaba bien, y persistía en llamarlo a Hugh, un viejo conocido. (Huuuuggh! Hughh!)

Las amigas, que hace rato habían pasado los 30, y tenían una larga historia de fiestas y magic moments compartidos, se limitaban a sonreír y la visión de un cuerpo doblado bajo el botón del inodoro despertaba regards:

“-Te acordás que yo si me sentía muy mal, iba al baño, me metía los dedos y volvía a los cinco minutos espléndida?
-Si querida, siempre te envidié por eso. Yo tenía que aguantar la resaca hasta el domingo a la tarde.”

Por fin, la rubia de bucles leonados terminó el ritual, se incorporó, miró alrededor y preguntó a sus amigas con una mueca molesta:

“-Chicas, ¿Quién es este tipo?”

Mientras Elle y Miss Ingtime reían comprendiendo que la amistad es una cuerda de la teoría M que no se rompe nunca, la leona tenía más para decir:

“¡Sáquenlo de acá!”

Y en una síntesis teórica antes de caer desmayada, añadió:

“Mezclé…”

viernes, 7 de agosto de 2009

I don`t know why

La Dra. Elle piensa que no hay razones para el amor.
She loves Charly´s songs.
Y tuvo ganas de dejar su nueva canción por aquí:

"Deberías saber por qué"

Che… si en verdad me tomás en serio,
deberías saber por qué.
En el fondo no es un misterio,
deberías saber por qué
te vas,
ahí nomás.
Todos van
hasta ahí nomás,
ahí nomás.

Che… si te ponés la camiseta
deberías saber por qué.
Aunque digas que no me meta,
deberías saber por qué
te vas,
ahí nomás,
todos van hasta ahí nomás,
ahí nomás.

Andando, preguntando, discutiendo,
caminando, esquivando tu manera de ser.
Gritando, discutiendo, corrompiendo,
agonizando hasta el dia que te volveré a ver.

( Hablando, custodiando, divagando,
haciendo cosas que no quiero hacer,
descubriendo su manera de ser
por eso…)

Che… si es que entraste a mi apartamento,
deberías saber por qué.
Es muy fácil decir lo siento,
es muy fácil sentirse bien igual,
bien igual.

Che... si en verdad me tomás en serio
deberías saber por qué.

Forever Young


Alguna gente teme a la Afip, otros se desvelan por la inseguridad y la Dra. Elle Woods fue acosada por Mary Kay ´s door-to-door sales agent.

Usó una técnica de asalto tan efectiva que si la vendiese a los Testigos de Jehová haría más plata que Moyano, también sin trabajar.
Consiste en conectar el producto con el pasado, presente, futuro y próxima reencarnación de la kaygirl de turno, haciéndole creer que la primera puerta del infierno es su propia cara. Nada de condenas eternas, you are a hell hole now!
Veamos:

“- Vos usás cremas? –dijo.
-No.
-Nunca usaste?
-Mh, no mucho…
-Noooooooooo! (remember Linda Blair in The Exorcist).
...Neeena! YA tenes que usar! Sos joven! En cualquier momento te aparecen MAS arrugas!” (Ouch!)

Siguió a esa patada en los riñones una profecía de calamidades irreversibles con ez: dejadez, vejez, flaccidez, viudez, feez, and so on.
En pos de acallarla y dejar de contaminar sus doradas orejitas con eces (-no-reply, plis-) tuvo que sumarse a su campaña por la Belleza Universal.

Sepan que lo que tenga un sticker Mary Kay es bueno, imprescindible, caro y no usarlo es un atentado visual contra la especie humana.
Sus cremas son lo mejor que puede pasarte en la vida, ya que en el mágico mundo de las emulsiones hay demonios acechando: La crema de leche, danger! La crema chantilly, no way! Y la crema pastelera, deus nos libre! La cremación?... say no more.

El glamour reina en el toilette y con tantos productos que se pone de noche ya no necesita insecticidas en casa.

But, why the hell se sentía más joven cuando su cara no era Kay?

miércoles, 5 de agosto de 2009

Geometry


En una de las variantes del Forbidden Love suelen estar involucrados terceros, conformándose un triángulo nada equilátero:


A- Sujeto con mucha capacidad de amar.
B- Inocente rubia palomita.
C- Tercero incluído temporariamente.


Debido al ajetreado ritmo de la vida moderna, las limitaciones espacio-temporales y los celulares con cámara, mantener rozagante el Forbidden Love es una tarea comparable a cualquier hazaña legendaria como el cruce de los Andes o el cruce de Villa Fiorito sin que te roben.
Tener un amante es más descansado en lugares como conventos, trincheras subterráneas o minas de estaño o cobre. Por lo demás, vivas donde vivas, no estás libre de cruzarte con tu tía Liliana a la salida del telo.

El lado A del FL es un sujeto que necesariamente presenta dificultades en el ámbito del juicio y las decisiones.
Cree que la Confusión es un deporte extremo, al cual se entrega sin resistencias.
Posee una notable capacidad de producir argumentos nonsense, por ejemplo: “No la puedo dejar ahora porque su madre está enferma” (como si fuera un anestesista en una operación a corazón abierto) o “¿Está mal querer a dos personas a la vez?” (No está mal idiota, lo que está mal es que me tengas más escondida que Bin Laden!)
Lo único que puede perder es la vergüenza, o sangre en caso de sufrir un accidente. Nada más.

El lado B, en adelante Rubia Palomita, pasó de un cómodo primer lugar en la vida de A a un limbo sostenible a costa del inefable poder de la negación. Sus días transcurren entre vagas sospechas rápidamente desestimadas y regalías obtenidas de la culpa y remordimiento de A, que al fin y al cabo, no es tan desalmado e intenta reparar débilmente los daños ocasionados.
De ahí los regalos inmotivados, la súbita aceptación de propuestas antes ridiculizadas, como pasar un fin de semana con la familia política de A.

El lado C del FL, suele ser alguien que pasa de estar comiendo un apetecible sandwichito a ser el jamón del medio del mismo.
Lo que iba a ser un inofensivo touch and go ahora es un amor imposible y se siente más expuesto a los peligros que Bruce Willis en Duro de matar IV. Ya no duerme bien, teme que Rubia Palomita despierte de su pesado sueño y venga a serrucharle la puerta a las 4 de la mañana. Para colmo, cuando por ventura osa esbozar un reclamo, se encuentra con la imperturbable respuesta de A: “Vos ya sabías como era esto…”

Como ven, amarillos corazoncitos, no todo lo que reluce es gold... ("/Y el tiempo que te quede libre/si te es posible/ dedícalo a mi!/")

martes, 4 de agosto de 2009

Chemistry


Quizás se deba a las relaciones más secas que líquidas, a la insoportable posmodernidad del yogur ser o simplemente, rubios cerebritos, a la naturaleza humana.
Todo rubio - natural o tuneado - que tenga un poco de experiencia en el fétido pantano
de la vida amorosa alguna vez se encontró
moqueando frente a una ventana, un escobillón, o un enchufe preguntándose incrédulo “-¿Por qué?”
Efectivamente, el tarado o la yegua en quien habías depositado tus más sinceras y gansas proyecciones infantiles acerca del Amor y sus funciones integradas y derivadas, estuvo, está o planea estar en breve intercambiando fluídos íntimos con otra entidad viviente.
Es preciso entender, blondas palomitas, que la monogamia tiene menos vida que una mariposa engripada.
A saber:
Tenemos una pila de advertencias químicas, físicas y matemáticas al respecto, que arrojan luz sobre la materia oscura. En cualquier manualucho de química orgánica duermen incomprendidas innumerables verdades acerca del amor, su principio, sus minutos de fama y su penosa pero no impredecible declinación.
Con el tiempo, los receptores nerviosos que saltaban de alegría cuando aparecía la luz de tus ojos amblíopes se cansan, deciden que el kick boxing ya fue y que ahora quieren tai chi con la wedding planner. ¿Y entonces?
No sos vos! Es la química!
Aceptemos nuestros caprichos sinápticos y dejemos que las dendritas se entretengan sin pedirnos permiso!
Ni hablar de las retorcidas reacciones conductuales de la rubiandad: si sos brillante el otro te admira hasta que se siente opaco, si sos bueno, se aburre ante la presunción de tu nobleza inquebrantable, si sos linda, los celos florecerán destruyendo la poca estima conque contaba el celoso, si sos malo, caprichoso y egoísta todo andará sobre rieles hasta que tu pareja se tope con algún psicólogo esclarecido y al cabo de tres sesiones te demolerá tu apacible y despreocupada existencia.
No obstante, hay una excepción llamada Forbidden Love, que pone a los receptores en estado de revolución permanente, los vuelve ciegos, sordos, mudos, pelotudos y resistentes a las tormentas solares, dándole más velocidad a las calesitas desenfrenadas sobre las cuales giran los citados aminoácidos. No hay con qué darles!
Se sugiere desde esta editorial hacer caso omiso de los amores prohibidos y escuchar el tema “Pastillas para no soñar” cada media hora.

Anyways, ojalá se enamoren!